6 de enero de 1916- 6 de enero 2016: una centuria de hermandad y cofradía
Publicado de Ángel López Sánchez (Secretario General) en Centenario · Miercoles 06 Ene 2016
Cumplir años es importante, cumplir 100 años es muy importante, no es una cuestión baladí.
Muchos son los avatares que surgen a lo largo de todo un siglo de existencia. Muchos obstáculos han ido sorteando las personas que han pertenecido y pertenecen, han trabajado y ahora trabajan y han estado y ahora están al frente de esta Muy Ilustre y Real Cofradía de Nuestro Padre Jesús Caído y María Santísima de la Esperanza.
Una brillante historia jalona el recorrido de esta primera centuria, hasta desembocar en lo que ahora somos, con nuestros aciertos y nuestros errores.
En 1916, el alcalde de Valdepeñas era Vicente Camacho Molinero, al que en 1917 sustituyó Onofre Cornejo Caminero, siendo rey de España Alfonso XIII. El siglo XX se inició marcado por las convulsiones sociales, y aunque la filoxera llegó a Valdepeñas en 1900, no se interrumpió el comercio del vino gracias a las previsiones de cosechas anteriores que se almacenaban en las centenarias cuevas. Hasta 1926 no llegaría el agua potable a nuestra ciudad.
A todo esto, un 6 de enero de 1916 está firmada la primer acta de esta Cofradía, y en junta general se nombró esta directiva:
Presidente: Diego de Elola y Osorio. Vicepresidente: Manuel Cruz y Merlo. Secretario: Aresio Viveros López Tello. Vicesecretario: Carmelo Madrid Penot. Tesorero: Domingo Ruiz de León, y como vocales: Juan Antonio Gómez Cornejo, Emilio Galán López Tello, Emilio Jalón, Clemente López de Lerma, Manuel Bárcenas y Antonio María Vasco Santa María, los cuales, dice el acta “todos aceptaron sus cargos”.
Me gustaría echar la vista atrás y dejar plasmadas unas pinceladas históricas, pero les emplazo a una posterior conferencia pública.
En este comentario, dejar únicamente constancia del gozo que supone la celebración del I centenario fundacional, de la importancia de la efeméride. Ya sabemos que es buen momento para hacer balance de su historia y afrontar el futuro. También es un buen momento para rememorar la trayectoria de todo un siglo, y que a pesar de las desgraciadas turbulencias que surgieron durante la guerra entre españoles (1936-1939), y de los años que se pasaron en blanco, supo resurgir en la década de los cincuenta, recuperarse definitivamente en la década de los sesenta y a partir de ahí, mantenerse y potenciarse contra viento y marea.
El fervor no ha decaído, la cofradía se mantiene respetuosa de sus formas y su historia y con este centenario se pretende conjugar el carácter religioso de esta corporación penitencial y la idiosincrasia que por sus vinculaciones y hermanamientos distinguen a la misma, pero ante todo con la finalidad de ensalzar a los titulares: Nuestro Padre Jesús Caído y María Santísima de la Esperanza.
En el reverso de esta fotografía se puede leer textualmente: “ Viva Jesús. El paso de Jesús Caído de la Semana Santa de Valdepeñas antes de guerra, pasando por la plaza de la Veracruz”. Carte Postale. En la estampilla figura el sello de Zamora.
Enhorabuena y Felicidades a cuantos han hecho posible esta efemérides.